sábado, 4 de julio de 2009

Honduras, punto y seguido de Perú y Argentina.


Con 7.8 millones de habitantes, una inflación sobre el 6%, con remesas familiares que representan, en caída, el 26% del PIB, con un salario mensual mínimo de 127$, por debajo del resto de América Latina, y un sector bancario y agropecuario que crecen sobre el 10% y 8%. Las contradicciones para instalar un sistema parecido al de Caracas se antojaban imposibles. Los 28 años de democracia hondureña se van al orinal por un intento de reformar la Constitución al estilo venezolano.

Razones para la trama golpista: El acercamiento a Chávez y a los Castro. La elite militar y civil vio sólo una aspiración personal y una sociedad bajo el lema Socialismo Patria o Muerte. Un mayor control, desde las bases, del aparato político y económico (nacionalizaciones, expropiaciones.). Un Estado ideologizado a lo venezolano. Una experiencia previa, en Venezuela (aunque ha mejorado su tasa de ocupación tiene una inflación del 30%), Cuba, Bolivia y Nicaragua poco halagüeñas, y la falta de apoyo del partido, del ejercito y de una masa crítica leal y combativa. Ollanta Humala perdió en Perú, los Kirchner en Argentina y Zelaya en Honduras, ¿el común denominador?. El Líder bolivariano.

Otros leen que gracias a Chávez ganó Morales las últimas elecciones, que Ollanta creció 14%, y que los Kirchner perdieron por solo 2 puntos. El regreso de Zelaya a Honduras es por la presión internacional, y la reforma constitucional quedará es “ya veremos”. Es un golpe contra Honduras y el chavismo.

domingo, 28 de junio de 2009

Hugo Chávez: The Way of Life o el Socialismo del SXXI?

El éxito del Socialismo del SXXI pasa por consolidar una nueva cultura, en Venezuela, en la región y en el mundo. ¿Qué puede entender Chávez por nueva cultura?, la abolición de los valores, símbolos y hábitos actuales: El estatus de acuerdo a los bienes privados debe dar paso a la propiedad social (no-privada), el conocimiento debe ser planificado por el estado, y la acumulación de poder militar es fundamental. ¿Cómo hacer creer que su revolución es lo bueno, y lo demás lo malo?, creando un marco cultural integrativo donde el hábito se transforme en costumbre y trascienda a las nuevas generaciones; institucionalizando la camisa roja, la conducta y el lenguaje como símbolos de cómo comportarse y cómo no hacerlo en relación al mismo objetivo, facilitando conocer, así, dónde está el enemigo y dando rango de permanencia y confianza.

Y, ¿si el cambio cultura no se logra?, continuará el orden burgués y la revolución se pierde. Chávez necesita sustituir el way of life como base universal, y establecer un sistema que no sea percibido como una amenaza sino como una oportunidad participativa. En los últimos 10 años los elementos componentes de la cultura venezolana no han cambiado, ¿cuánto tiempo persistirán?, hasta que la revolución no se convierta en un movimiento de masas, sobrevivirán. Pero la revolución es intemporal y mundial.