sábado, 30 de mayo de 2009

Otra empresa internacional cae en Venezuela


“Voy a estatizar todo, menos empresas brasileñas”, le prometió Chávez a Lula. Tan distraído es Chávez que esto no lo dijo en privado, ni tuvo la precaución de asegurarse que los micrófonos estén apagados. Lo cierto es que hasta el momento, las empresas brasileñas efectivamente están a salvo de la mano estatizadora de Chávez.

Este proceso de eliminar la propiedad privada extranjera en Venezuela no se detiene. Chávez sigue con su plan de recuperar el control de sectores estratégicos en la economía. Ahora a su ideología se suma la necesidad de hacerse de fuentes de recursos ante las dificultades provenientes del sector petrolero. Y si bien no fue una estatización, esta vez decidió no prorrogar la concesión Gold Reserve de una filial de la minera canadiense Gold Reserve (AMEX:GRZ) en el proyecto de oro Brisas, uno de los mayores depósitos de oro en América Latina.

Globovisión, ¿Otra RCTV?. Zuloaga ¿Otro Rosales?. Chávez ya dictó sentencia.


Poco antes de las 23.00 hora local (03.30 GMT del viernes), Chávez dio por terminado el segundo capítulo de la edición especial que se prolongará hasta el domingo, en directo desde diversos puntos del país aunque sin que se hayan precisado horarios o lugares, con motivo del décimo aniversario de su programa.

El mandatario venezolano comenzó a las 20.10 hora local (00.40 GMT del viernes) la segunda entrega de este jueves con un homenaje al fallecido poeta uruguayo Mario Benedetti, en transmisión desde el palacio presidencial de Miraflores en cadena nacional obligatoria de radio y televisión.

Recitó el poema "El Sur también existe", de Benedetti, e hizo una conexión en vivo con poetas e intelectuales reunidos en el Teatro Teresa Carreño de Caracas en un homenaje al poeta, fallecido el pasado 17 de mayo a los 88 años en su residencia de Montevideo.

En las casi tres horas que duró el "capítulo", Chávez también leyó pasajes de la vida del prócer venezolano Simón Bolívar e insistió en su continua defensa del sistema socialista como garante de la justicia y la igualdad frente al capitalismo, al que volvió a culpar de los males que aquejan a su país y al mundo.

Durante la intervención, el gobernante llamó "traficante de vehículos" y "delincuente" al empresario Guillermo Zuloaga, presidente de la cadena de televisión opositora Globovisión, por un caso de presunta "retención irregular" de automóviles que investiga la Fiscalía.

Chávez hablaba de la supuesta condición de intocables que se adjudican a sí mismos los "ricos" cuando citó el caso de un "señor dueño de un canal de televisión", cuyo nombre no pronunció, que presuntamente incurrió en un "robo" al pueblo y en una "violación" a las leyes vigentes.

"Es un traficante de vehículos", dijo el presidente, que rechazó las acusaciones opositoras de que "persigue" a sus detractores al afirmar que "acá que cada quien asuma su responsabilidad".

La Fiscalía informó hoy de que citó a Zuloaga, también dueño de dos concesionarios de venta de automóviles, para el próximo 4 de junio por un presunto "almacenamiento irregular de 24 vehículos".

Zuloaga preside Globovisión, una cadena acusada por el Gobierno de Chávez de "terrorismo mediático" y sobre la que pesan tres expedientes administrativos del ente regulador de las telecomunicaciones (Conatel).

Chávez exigió a las autoridades de diferentes poderes del Estado, incluido uno de sus ministros responsable del ente regulador de las telecomunicaciones, que actúen contra medios de prensa que a su juicio "envenenan" al país o que renuncien a sus cargos.

"No me lo pueden dejar a mí, nada más; es problema de todos, de toda la sociedad. Yo voy a esperar a que se cumpla lo que tiene que cumplirse", pero "si no ocurriera lo que tiene que ocurrir, yo voy a tener que actuar; yo mismo, valga la redundancia", subrayó en el "primer capítulo" de su "Aló Presidente".

Programa "pedagógico"
Por la mañana, Chávez lanzó su maratoniano programa con una primera entrega de cinco horas en la que calificó "Aló Presidente" de programa "pedagógico" para el pueblo venezolano.

"Comienza hoy y termina el domingo... no se sabe a qué hora", comentó Chávez en directo a través de la estatal Venezolana de Televisión (VTV), sin dar detalles sobre el horario que tendrá el programa en estos cuatro días y limitándose a decir que irrumpirá "cuando menos lo esperen".

En la edición especial, que comenzó en una planta eléctrica del occidental estado Zulia, considerado bastión de la oposición, el presidente invitó a las personalidades de sectores conservadores que participan en un foro sobre libertades en Caracas a acudir a su programa y debatir con intelectuales "revolucionarios".

"Se me ocurre algo en este momento (...). Invito a esta gente, les doy un espacio en Aló Presidente que es continuo de aquí al domingo", manifestó Chávez.

Entre los participantes en el "Encuentro sobre Libertad y Democracia" se encuentran el escritor peruano, nacionalizado español, Mario Vargas Llosa, el ex presidente boliviano Jorge Quiroga y el ex canciller mexicano Jorge Castañeda, quien dijo que estaba dispuesto a hablar con Chávez de democracia y derechos humanos.

En las más de siete horas y media de intervención, entre anuncios y comentarios, Chávez conversó también con familias de barrios humildes caraqueños a las que otorgó títulos de tierras urbanas y prometió una "reordenación" capitalina rumbo a una Caracas "socialista".

miércoles, 27 de mayo de 2009

¿Sabe usted que las tierras del mundo pertenecen a unos pocos?

ANCHORAGE, Estados Unidos, may (Tierramérica ) - Más de 20 millones de hectáreas de tierras en el mundo en desarrollo están en manos de gobiernos y empresas extranjeras, ejemplo de una apropiación agraria que se disparó con la crisis alimentaria del año pasado. Los países ricos, con poco territorio o agua disponible, buscan tierras que les permitan garantizar la seguridad alimentaria de sus poblaciones, dijo Joachim von Braun, director del Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias (IFPRI, por sus siglas en inglés).

El estudio del IFPRI "Expropiación de tierras por parte de inversores extranjeros en países en desarrollo", estima que entre 15 millones y 20 millones de hectáreas han sido compradas o están en operaciones de venta. Eso representa casi la cuarta parte de las tierras cultivables de Europa.
Es difícil conseguir datos fiables, pero el IFPRI calcula que esas operaciones implican inversiones de entre 20.000 y 30.000 millones de dólares procedentes de China, Corea del Sur, India y los estados del Golfo Pérsico o Arábigo, principalmente en África. "Alrededor de la cuarta parte de estas inversiones son para plantar vegetales destinados a elaborar biocombustibles", dijo Von Braun. Hace ya 10 años que China comenzó a subarrendar tierras para producir alimentos en otros países, como Cuba y México. También ha adquirido propiedades en África, donde hay negocios pendientes por millones de hectáreas en la República Democrática del Congo, Tanzania, Uganda, Zambia y Zimbabwe, con el añadido de varios miles de trabajadores chinos "importados" para trabajar esas tierras, según el informe.

Sudán tiene la mayor cantidad de tierras de cultivo africanas en manos foráneas, en este caso un grupo de estados del Golfo. El año pasado, Emiratos Árabes Unidos logró varios acuerdos con Pakistán. Qatar tiene tierras agrícolas en Bahrein, Birmania, Filipinas, Indonesia y Kuwait.

La enorme compañía coreana Daewoo Logistics Corporation firmó un acuerdo para subarrendar 1,3 millones de hectáreas en Madagascar, a fin de cultivar maíz y palma aceitera, una presencia que jugó su papel en los conflictos políticos que condujeron al derrocamiento del gobierno este año, según el informe. "El número de acuerdos por tierras es mucho más elevado que el citado por el IFPRI. Nadie revisa esos negocios agrarios privados", dijo Devlin Kuyek, investigador de la organización no gubernamental Grain. Los dos mayores productores porcinos de China pertenecen al banco de inversiones Goldman Sachs", señaló Kuyek. Así, hacendados y agricultores se convierten en empleados, opinó. Pero para cientos de millones de minifundistas, podrían terminar en expulsiones. La mayor parte de las tierras agrícolas africanas son propiedades consuetudinarias, sin títulos formales, según Meinzen-Dick. "Cuando llegan los extranjeros a comprar tierras no reconocen esos derechos tradicionales, que deben respetarse", dijo a Tierramérica.
Von Braun ve un gran potencial en esos negocios, porque llevan capitales muy necesarios a sectores agrícolas de los países pobres, impulsando la infraestructura y la investigación. "China está creando varias estaciones de investigación en África para estimular los rendimientos del arroz y los granos", dijo. Kuyek discrepó. "Esas inversiones no tienen nada que ver con el desarrollo agrícola. Se trata de hacer dinero y despachar alimentos a los mercados de origen", sostuvo.

Las empresas procesadoras e incluso vendedores minoristas de alimentos están involucrados en el negocio porque les importa garantizar la "seguridad de suministro" del modo más eficiente posible, dijo Janice Jiggins, del Instituto Internacional para el Ambiente y el Desarrollo, en Londres. Uno de los mayores bancos del mundo, el Rabobank de Holanda, es uno de los principales financiadores de este tipo de acuerdos, dijo Jiggins a Tierramérica por correo electrónico. El último informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Olivier de Schutter, detalló las implicancias legales de esos negocios y advirtió que violan derechos adquiridos, consagrados por leyes, constituciones y tradiciones, afirmó Jiggins.